Hoy es un buen día para volver a comenzar. Olvidar el pasado y vivir el presente. Renunciar a las cargas de la vida y dejar todo en las manos de Dios.
Creemos que podemos con todo y se nos olvida que somos humanos. Que necesitamos tomar un segundo respiro para poder continuar. Que es mejor llegar a la meta seguro, que tener miles de tropiezos. Porque queremos correr en vez de caminar y disfrutar el proceso.
Al final del día es mejor decir “lo intente“ y saber que diste lo mejor. A decir que no lo intentaste y quedar con la incertidumbre de que hubiera pasado.
Te dejo con esta historia:
Había un joven que deseaba conseguir un empleo en una expresa la cual era muy prestigiosa. Este joven tenía estudios y se había graduado recientemente. Sin embargo, no tenía experiencia y él pensaba que no estaba capacitado para solicitar un puesto en dicha empresa. Lo que él no sabía, era que esta empresa estaba buscando a personas sin experiencias para capacitarlas y entrenarlas para un proyecto que iban a comenzar. Este joven perdió la oportunidad de demostrar sus conocimientos y lograr uno de sus sueños. Por el simple miedo de no arriesgarse a fracasar y morir en el intento…
¨La felicidad es una decisión: serás tan feliz como decidas serlo¨.
© 2015, Patricia Acevedo López